MATERIALES ESTRUCTURADOS PARA GUIAR EL PROCESO DE ENSEÑANZA Y APRENDIZAJE EN EL SECTOR DE EDUCACIÓN MATEMÁTICA

Actualmente la reforma educacional está encarando decididamente los procesos de aprendizaje, orientando a los alumnos hacia conocimientos significativos que se requieren tanto en la formación científica como en la resolución de problemas cotidianos. En este contexto los “métodos activos”, tienen una importancia relevante en todo desarrollo curricular que la Escuela tiene como responsabilidad.

Son muchas las variables que los orientadores del proceso educativo deben considerar para lograr objetivos programáticos. Una de ellas, lo constituye el material de enseñanza, entre cuyas finalidades, se podría señalar su función de enlace entre la experiencia y el lenguaje tecnológico o científico para interpretar la realidad.

Tal es el caso de los materiales estructurados que se deben utilizar en el sector de la Educación Matemática. Es sabido por todos los pedagogos que se dedican a la enseñanza de las matemáticas, las dificultades que se presentan en el proceso de aprendizaje. Estas dificultades tienen relación, entre otras, con la falta de materiales que “ayuden a pensar” a los alumnos, de modo que sean capaces de elaborar conceptos, manejar un lenguaje usado por la ciencia y finalmente aplicarlo en el mundo que los rodea.

Uniendo la experiencia docente con el conocimiento del uso de materiales, tales como el acrílico y la madera, hemos construido un maletín o KIT MATEMÁTICO, integrando una serie de materiales didácticos entrelazados, armados y/o en redes, el que acompañado de una orientación de uso, está destinado como apoyo a la labor pedagógica de nuestros profesores del sector de Educación Matemática.

El material que se presenta, confirma que no tiene sentido separar las distintas ramas de la Ciencia Matemática, tales como Geometría, Aritmética y Álgebra y que son tantas las conexiones entre ellas que no se puede hablar de una sin introducir algo de las otras, contribuyendo de este modo al desarrollo de habilidades de visualización espacial, cálculo numérico, medición de espacios tri, bi y unidimensionales, manejo algebráico (entre ellos, el concepto de variable) y la resolución de problemas como el centro del desarrollo del pensamiento matemático.

Este material estructurado, para el aprendizaje de la Geometría, orienta la integración de las disciplinas que conforman la Matemática. La Geometría es el estudio del espacio, que se pudo elaborar gracias a que existen objetos en él. En este proceso se pueden distinguir 3 mundos:

a) El práctico o real (el primero con el que se encuentra el niño, por ejemplo, cuando juega con una pelota o con un sombrero de bruja).

b) El mundo de los sólidos perfectos, que ocupan espacios tridimensionales (inventados por los matemáticos, tomando como modelo los objetos reales, para estudiar y cuantificar el espacio).

c) El mundo de la representación, que puede ser dinámica, por ejemplo, a través del material que se presenta,  o estática, o bidimensional como un dibujo.

Empezar en la escuela con los dos primeros mundos, a través de manipulaciones, observaciones, descripciones, registro de hechos, que preceden al análisis, les permitirán a los alumnos darse cuenta de que lo que están aprendiendo son las conexiones al interior de una estructura y que permiten más de una representación física y que se puede traducir al lenguaje y simbología, propios del lenguaje universal y propio de las Matemáticas.